No sé si tendré fuerzas, pero en estos momentos lo único que deseo es coger la cama con mucho gusto, porque estoy “baldado”, y no será para menos, porque aunque el trabajo de un arqueólogo puede parecer interesante, el trabajo duro es siempre al principio, es decir…cavar. Tras una breve explicación y visita por el poblado por parte de la codirectora de la excavación, me ubique en la zona preparada para trabajar, es decir, en la habitación contigua a los hallazgos encontrados el año pasado (por supuesto bastante interesantes, con mucha cerámica recuperada con señales de combustión, lo que indica que esa habitación en concreto sufrió un incendio).
Junto Alejandro y Dani nos pusimos a darle “hachazos” a la enorme raíz para ir reduciéndola, ya que era un obstáculo para seguir trabajando. Nos turnamos, ya que cansa de lo lindo, tanto, que acostumbrado a ir al Gym, me temo que voy a hacer vacaciones, incluso de los entrenos. Hasta prácticamente las 18 horas de la tarde, estuvimos descuartizando la raíz, hasta que al final con la incorporación de dos jóvenes con ganas, dejamos la zona lista para cavar y paletear. Mientras cavábamos encontrábamos fragmentos de cerámica entre los sedimentos (típica cerámica arcillosa y anaranjada de diferentes texturas y rugosidades, ya que las más rugosas al tener mayor proporción de desengrasantes se usaban para cocinar, mientras que las que eran más finas en textura y composición, eran recipientes de adorno o para contener líquidos).
Tras sacar sedimentos y hacer el pesado trabajo de llevarlo en capazos hasta la zona exterior de donde se supone que esta el muro exterior, se pudo apreciar una roca, que pudiera integrar parte del muro que delimita la habitación, pero aun debemos excavar más, ya que cerca de ella, a aparecido otra roca que está orientada en forma oblicua, que bien podría haberse desprendido. Estas dos piedras parecen haber sido talladas, ya que tienen los vértices marcados y una clara forma rectangular, con lo que parece ser que vamos por buen camino, aunque aún es pronto, por el momento.
Después de nuestro merecido descanso, seguimos cavando y ampliando el perímetro para tener una perspectiva más clara de la línea y de las rocas que lo componen, pero aún estamos muy arriba del nivel. En un momento dado me requirieron para dar lecturas con el teodolito o nivel topográfico, lo cual, acepté entusiasmado, ya que fue la primera vez en usar este instrumento. Aunque mi compañero de “pico y pala”, me miraba diciendo (te has pasado a la buena vida, eeh). Una vez tomada las lecturas, me reincorporé y seguimos cavando, pero, se evidenciaba el lógico cansancio, debido al ímpetu inicial con la raíz, la espalda se resentía, las manos entumecidas y llenas de cayos, el cuerpo te pide y te suplica descanso, pero aunque sea poco a poco, seguimos con nuestro cometido. Acercándose las 21 horas y un leve chispeo de lluvia, recogimos todo y mañana, será otro día.
Día 2 (28/06/2013)
Al parecer hoy y gracias a las explicaciones de Jandro, he podido coger mejor técnica con el pico aprovechando la “gravedad” y la caída libre, deslizando la mano, en vez de sujetar el pico con las dos manos, pero los riñones siguen resintiéndose con las “paletadas” de sedimentos, ya que en vez de bajarlos con capazos, los lanzábamos ladera abajo a golpe de pala, y la cintura sufre lo suyo. Hoy hemos proseguido los trabajos con la incorporación de Anna, una chica muy maja y simpática que nos ha ido muy bien y se ha reído mucho con nuestro show de “Hassan y Hassim”, entre Jandro y yo (parodias de humor al estilo Cruz y Raya), bueno de hecho todos se lo han pasado bien hoy, ya que se notaba que era viernes. Incluso hemos bailado el “Ecuador”, entre Juan, Gemma y yo, al estilo gogo, pero he de decir que eso fue durante las últimas 2 horas, y es normal, que también tengamos estos momentos de humor, ya que hace entrañable la tarde y menos pesado el trabajo.
En cuanto al nivel de la habitación, hemos podido unir un primer nivel con el sector más al este del habitaculo, pero aún queda mucho. También los compañeros que trabajan en la parte superior, han podido perfilar dos canalizaciones talladas sobre la roca natural. Hemos seguido encontrando fragmentos de cerámica, incluso cerámica oscura, propia de una cocción poco oxigenada, pero “mi minuto de gloria”, fue cuando me di cuenta mientras picaba, en una cerámica enterrada que no parecía ser pequeña. Cuidadosamente con una paleta pequeña perfilé su perímetro, mientras lo acompañaba con el cepillo para determinar si tenía continuación, hasta que al final pude extraer un fragmento de cerámica de unos 7x4 cm, de momento, el primer fragmento superior a 3 cm que hemos encontrado. Debido al gran hallazgo, de un novato como yo, Jandro me hizo una foto para inmortalizar el momento.
Acercándose ya el atardecer, fuimos limpiando la zona para realizar unas fotos y dejar los trabajos para el Lunes, con más refuerzos que tendremos entre nuestras “filas”. Un fin de semana de relax por delante, no va nada mal.
Día 3 (01/07/2013)
Hemos vuelto con energías recargadas tras el fin de semana y con la incorporación de Alfonso y Lidia en el grupo. Así que como hoy éramos más, un grupo se ha dedicado a excavar para detectar el muro exterior Oeste, mientras el resto continuaba concentrado en la habitación cercana al complejo rocoso.
Mi inseparable compañero Jandro, se fue para el Muro Exterior, mientras yo continué en la zona asignada, en la cual ya llevo 3 días. Se ha seguido encontrando cerámica en los niveles superficiales y algunas partes correspondientes a asas, e incluso algún fragmento con detalle de decoración por impresión.
Hemos excavado un primer nivel de aproximadamente unos 20 cm y ahora nos quedará excavar un segundo nivel, pero en el lado oeste, se aprecia ya, derrumbamiento por la distribución de la piedras que asoman. Todavía nos queda mucho trabajo y ganas no nos faltan. Mañana más.
Día 4 (02/07/2013)
Hoy éramos muchos más en la excavación y se noto como aceleró el trabajo. Para empezar desde la zona donde están buscando el Muro Exterior Oeste, apareció un empedrado bastante interesante. Además se está limpiando la zona de la entrada del poblado.
En la zona cerca del complejo rocoso continuamos cavando ya hacia un segundo nivel y se ha encontrado en la parte más a la derecha del recinto, restos de roca, indicando un derrumbe en la zona.
En la parte izquierda han empezado a asomar restos de cerámica interesantes, como asas de diferentes formas y dimensiones, y algunos fragmentos de unos 15 cm, lo que indica que estamos llegando a un nivel donde podría haber cerámica parcialmente intacta, a no ser que la presión de las raíces, los sedimentos y rocas hayan roto la cerámica (que es muy posible), ya que los factores naturales afectan en contra de la conservación de restos arqueológicos, aunque en algunos casos ayuda, como es en el caso de zonas áridas o desérticas, donde la escasa humedad favorece la conservación de los mismos.
Un asa de ánfora asomo en uno de los filos de la excavación y perfile su zona hasta extraerla con cuidado, ya que no parecía estar unida al cuerpo de su recipiente original. La pieza media unos 8,5 cm y era de forma semicircular. Posteriormente entre Manel y Adrian extrajeron una segunda asa que estaba a la derecha, aproximadamente a un metro de donde se encontró la primera asa. Esta segunda asa media unos 11,5 cm y era de forma ovalada, seguramente de un cántaro o ánfora alargada. Estos restos indican que sus recipientes originales deberían ser de gran capacidad, ya que sus hendiduras permiten introducir de uno a cuatro dedos, con lo cual indica que la sujeción del mismo ha de ser firme.
Finalizada la jornada, volví cansado pero con una grata sensación y una fuerte motivación y es que, tocar un objeto que la última vez fue tocado por un ancestro hace más de 2000 años, no tiene precio. Es una sensación indescriptible, y aunque no sea oro, ni un tesoro valioso para algunos, para alguien como yo y mucha gente que defiende el patrimonio histórico, esto tiene más valor que cualquier “millonada del mundo”, porque forma parte de nuestra historia, nuestra evolución y tenemos mucho que aprender de ella.
Día 5 (03/07/2013)
Nuestros trabajos siguen a marchas forzadas pero con cautela, ya que empiezan a salir restos de cerámica importantes, como se puede ver en las fotografías. Además en una estancia contigua a la zona del Muro Oeste, se ha encontrado restos de lo que podría ser un fogón.
Ante los sabios consejos de la Directora de la Excavación, Mercedes Duran (Historiadora y Directora del Museo Municipal de Montcada i Reixac) me gustaría dejar claro, que este diario de excavación que presente en mi blog al público, es solo mis vivencias en dicha actividad. Aún no soy arqueólogo, ni estos artículos tienen un fin científico y sabiendo que en este mundo existe mucha “piratería”, ni mis fotos van a ser profesionales, ni van a ir acompañadas de “jalón”. Aún así entiendo que el acceso a internet es global e inevitable y la copia de fotos y documentos difícil de controlar. Así pues apelo a la responsabilidad de cada uno y a su propia conciencia en cuanto a sus actos. Es importante aportar información y que todos disfrutemos de ella, pero como complemento. Si alguien necesita hacer un trabajo, “que se lo curre un poco”, ya que últimamente estamos en la cultura del “Copy + Paste”, cosa que no beneficia en absoluto para el aprendizaje personal.
Día 6 (04/07/2013)
Seguimos excavando y bajando el nivel en la zona y delimitando el espacio hasta el perfil rocoso de la misma. Excavé por el lado izquierdo encontrando fragmentos de cerámica oscura y en la zona central encontraron la base de un cuenco que seguramente pertenece a los fragmentos encontrados antes de ayer con incrustaciones serpenteantes decorativas.
En la esquina superior derecha de la estancia, asoma un ánfora parcialmente fragmentada de grandes dimensiones, que posiblemente hoy se pueda extraer. Parece que promete la zona, pero aún debemos excavar más para averiguar, que finalidad tenia dicho sector y si guarda relación con la estancia contigua, excavada en el año 2012.
El siguiente video es de la excavación del año 2012, donde los hallazgos fueron sorprendentes, ya además de encontrarse mucha cerámica con signos de combustión, se encontraron hasta vigas de madera carbonizada, señales evidentes del incendio en la casa.
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